La Diosa Sol, comienza su viaje hacia nuestro Hemisferio. Desde el punto más profundo de la noche y del Invierno. De la Oscuridad a la Luz, del inconsciente a la conciencia….
La palabra solsticio se deriva del latín sol (‘Sol’) y sístere (‘permanecer quieto’), porque el sol sale y se pone en el mismo lugar por unos días. Este momento "estacionario" sugiere un aquietamiento, un tiempo de espera. Un periodo propicio para ir a nuestro interior, para hacer una pausa y reflexionar. Aquí en el hemisferio sur, esta es la noche más larga y el día más corto del año. A partir de este día en adelante, los días se hacen más largos. Este fenómeno es un resultado directo de la relación Tierra-Sol. En el solsticio de invierno, el Sol está en su punto más bajo: la noche más larga, el descenso más profundo en la oscuridad, y un giro subsiguiente del ciclo, un retorno a la Luz. Por lo tanto, después de la pausa, un movimiento hacia el renacimiento, señala el retorno y renovación de la fuerza de la vida. La Luz comienza a crecer de nuevo. Es por esto que muchísimas culturas, desde hace mucho tiempo, han celebrado este momento en una u otra manera. A fin de salvaguardar el Fuego Sagrado de la Vida, manteniendo la esperanza, reconociendo el poder de renovación de la Naturaleza. Celebrando para asegurar el retorno de nuestra estrella de la mañana, el sol. (info tomada de web)
Somos naturaleza... aprovechemos este momento de renovarnos
de cambiar la piel....
de renacer ....
este momento de magia y de entrega
compartiendo lo que somos.
Es el momento en que el Sol y la Tierra están mas alejados
es momento de aceptar nuestras sombras,
sentir las sensaciones que nos producen
y atrevernos a llenarlas de luz...
.... a amarlas porque son parte nuestra..
y permitirnos Renacer... esta vez Transformados
Amándonos con nuestra Luz y nuestras Sombras.
Se los digo y me lo digo...
Como Siempre Todo mi Amor
Romina Anahí Lera