
Para el Dr. Bach era esencial reconocer que el hombre nace con dos aspectos: uno espiritual y otro físico, sumando el desarrollo posterior de sus psiquis, así luego como unidad psicofísica-espiritual, su salud va a depender de la armonía de estos 3 aspectos.
Por lo tanto la Terapia Floral Bach trabaja corrigiendo los posibles desequilibrios energéticos psico-emocionales, restituyendo la energía que falta, modificando el conflicto interno, administrando armonía a toda la personalidad.
La Terapia Floral Bach no reemplaza ningún estilo de tratamiento que el paciente esté llevando, complementa terapias alopáticas u homeopáticas y pueden ser ingeridas a cualquier edad y frente a cualquier circunstancia de la vida: embarazo, niñez, edad adulta y ancianidad.

Las esencias florales no son tóxicas, no producen acostumbra miento.
Se recomiendan especialmente frente a todo tipo de patologías crónicas o transitorias que puedan estar produciendo disturbios en la personalidad, a saber:
- Cuerpo físico: dolores generalizados, contracturas, nerviosismo, obesidad, enfermedades reumáticas, gastritis, úlceras, problemas circulatorios, trastornos digestivos, insomnio, migrañas, anorexia, bulimia, y mucho más.
- Cuerpo emocional: miedos, pánico, depresión, tristeza, nostalgia, inseguridad, indecisión, impaciencia, celos, ira, rencor, culpa, desesperanza, apatía, falta de interés, falta de voluntad, soledad, duelos, pérdidas, agresiones, autoestima, y mucho más.
- Tiene aplicación directa sobre aspectos relacionados con problemas de aprendizaje, falta de memoria, falta de concentración, desvalorización personal, dispersión y mucho más que hacen a la actividad creativa del ser humano.
"La Terapia Floral es una terapia vibracional que devuelve el mando de nuestra vida al Alma"